Seis buenas prácticas de comunicación interna en tiempos de COVID-19

Por Bernarda Ortiz

Hay marcas que lo han hecho bien y hay quienes han cometido errores al momento de comunicar. Sin embargo el reto es el mismo para todos. La nueva normalidad parece que durará algunos meses- en el mejor de los casos- por lo que es necesario calibrar, constantemente, la forma de comunicar.

  1. Ser consecuentes - Ahora que la seguridad es una prioridad, las acciones de las marcas deben guardar coherencia con su comunicación y demostrar que sus plantas de producción y puntos de venta son espacios seguros para empleados y clientes.

  2. Ser empáticos - La presión a la que están sometidos miles de empleados es inmensa, se sienten vulnerables frente a la crisis económica y la crisis de salud. Por lo que incluir atención emocional es beneficioso y necesario.

  3. Equilibrar la comunicación - Es posible que las empresas saturen a su equipo con el objetivo de mantenerlo informado. Hay que priorizar la información, tener claros los canales y los objetivos que se deben cumplir.

  4. Mantener una actitud positiva - Frente a la adversidad, el líder debe inspirar a su equipo para enfrentar retos e identificar oportunidades. Un ambiente pesimista afectará el desempeño de los colaboradores y creará un mal clima de trabajo.

  5. Reconocer los aportes - Reactivar los negocios trae tranquilidad y es posible gracias al esfuerzo de cientos de personas que han hecho bien su trabajo. Reconocer a quienes han permitido que las empresas continúen operando es clave.

  6. Respetar los horarios de trabajo - El que ahora muchos los empleados trabajen desde el hogar, no significa que van a estar constantemente disponibles. Mantener un horario de trabajo, así sea desde casa, permite al colaborador un equilibrio entre sus obligaciones familiares y laborales y una sensación de satisfacción.